Espot es una estación que cuenta con más de 20 km esquiables y 1.000 metros de desnivel, y goza de una situación privilegiada en los Pirineos, a las puertas del Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici.
Se caracteriza por encontrarse dentro de frondosos bosques de pino negro y cuenta con el sello de calidad turística Destino de Turismo Familiar otorgado por la Agencia Catalana de Turismo, con el que se reconocen los principales atractivos turísticos dirigidos al público familiar de la estación y su entorno.
El Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici es uno de los espacios naturales protegidos mejor conservados del sur de Europa. A sus atractivos naturales y culturales, hay que sumarles ahora unas condiciones excepcionales para la práctica del astroturismo. Aquí todavía existen pueblecitos dispersos y escondidos entre montañas, como es el caso de los diez municipios del ámbito del parque, donde podemos disfrutar de la experiencia de un cielo negro en el que las estrellas son infinitas. Estas regiones merecen ser conservadas y pueden obtener los reconocimientos internacionales Destino Turístico Starlight y Reserva Starlight (Unesco), a medida que los habitantes de estas comarcas deciden emprender acciones para conservar la oscuridad del firmamento y no añadir más contaminación lumínica. En octubre de 2018 el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici obtuvo estas certificaciones.
Las pistas se caracterizan por encontrarse dentro de frondosos bosques de pino negro. Además, las imponentes vistas de montañas de más de 3.000 m hacen que el esquiador se sienta en plena naturaleza alpina. Espot es una estación reconocida por la calidad de su nieve, garantizada por tener más del 60 % del dominio esquiable con nieve producida.
Por otra parte, cuenta con tres pistas homologadas para la celebración de competiciones internacionales, lo que da una idea del nivel de las pistas y su idoneidad para los esquiadores expertos en busca de sensaciones. Asimismo, la estación cuenta con una amplia zona de debutantes en la cota 2.000 y un gran parque lúdico para que, tanto los más pequeños como los padres esquiadores, puedan disfrutar de un día completo en la nieve.
Una opción muy recomendable para los esquiadores o snowboarders de nivel medio es descender desde la cota más alta de la estación hasta pie de pista por pistas azules.
El pueblo de Espot, a tan solo 2 km de la estación, es un bonito pueblo rural típico pirenaico que combina la modernidad de sus establecimientos hoteleros y sus comercios con la tradicionalidad de sus edificios. El increíble marco natural que lo rodea lo convierte en la puerta de entrada al parque nacional.
Espot, una estación familiar para todos aquellos que buscan sensaciones en la nieve y la calidez de un pueblo típico alpino.